En el principio fue el Sur



En esto sabemos que estamos de acuerdo, y ello nos reconforta. Tanto en el monumental trabajo, ya referido, de Víctor Guillén, como en nuestras búsquedas de la memoria, hemos llegado al mismo lugar, hemos delimitado el territorio donde se trazó el punto cero. Para sorpresa de muchos, incluidos nosotros mismos, el Punto Cero no está en los ambientes urbanos, no en Badajoz, no en Cáceres, no en Don Benito, ni en Plasencia, ni en Mérida. El punto cero del rock extremeño está en Monesterio. Y tiene un nombre. Los Riscos. Y una fecha. 1972. Año en el que se graba el primer vinilo de un grupo extremeño con aliento e ingredientes pop.

Hay que viajar hasta 1948, año en el que nace en sus calles la Orquesta Hispano Lusitana, bajo la dirección Juan Martínez Riscos. Un año después muda de nombre para denominarse Orquestina Riscos, cuya existencia se constata hasta 1959, fecha en la que se crea el nuevo proyecto músico-vocal: Los Riscos.

Y llegados a este punto, le tomamos robadas las palabras a Manuel Martínez Frutos, hijo de uno de los miembros del grupo, y músico a su vez (Ícaro Caído, Skupeguadalupe). Gracias a Manuel, y a su cuidado y mimo por sacar a la luz el material grabado de los Riscos, hemos podido llegar a desentrañar la pequeña historia de los inicios del rock en Extremadura:

El grupo, que en su última etapa se convertiría en cuarteto, lo formaba cuatro hermanos (José, Felipe, Silvestre y Daniel Martínez Chaves), más un primo hermano: Joaquín Granadero Chaves. José (guitarra y voz) Felipe (órgano y voz), Silvestre (batería y voz), Daniel (bajo y voz) y Joaquín (trompeta y voz).

El nombre del grupo procede del segundo apellido del padre de los cuatro hermanos: Juan Martínez Riscos. Es de él, prestigioso y conocido músico, de quien reciben formación musical clásica desde muy jóvenes. También a través de su padre contactan con el productor y compositor Marcial Guareño que les propone grabar un disco en Madrid.

LOS RISCOS publicaron durante los años 70 cinco EPs y singles para el sello Berta y un último single para el sello Audio-Video. En ellos se incluyeron los temas “Sombra”. “Tormenta” y “Vivir es luchar”. Paralelo al tipo de música que venían haciendo, en 1979 realizan la grabación de seis temas con sentir extremeño y corte reivindicativo; con un sonido más cercano a los cantautores de aquel momento. Con los temas Extremadura olvidada, Amanecer en mi pueblo, El pastor, A las campanas, Juegos de niños y Anocheciendo.



En 1986 se pone fin a una experiencia maravillosa, insólita, pionera, emocionante. Aunque esta afirmación no es del todo cierta. Porque la saga continúa, como en las grandes películas americanas. Skupeguadalupe o Ícaro Caído algo tienen que ver con ese apellido que da nombre al minuto cero. Pero ellos ya forman parte de otra historia, de otra crónica.